Sábado 17 de octubre, 21,35. La banda de tecno pop paradigmática de los 80 empezó su show en la segunda fecha del Personal Fest con tres canciones de su nuevo disco Sounds of th Universe. Depeche Mode está de vuelta, una moda que se resiste a pasar y que con cada nuevo disco demuestra su trascendencia. Pero la mayoría estábamos ahí para escuchar los clásicos, que al final llegaron para emocionar por tanta nostalgia. Walking in my shoes, Policy of truth, Enjoy the silence, Never let me down again y hasta la hermosa balada Somebody en la voz de Martin Gore, fueron parte de un recital que tuvo un sonido impecable. Cerraron con Personal Jesus, ante treinta mil treintañeros al borde de las lágrimas.
Domingo 18 de octubre, 21.30. Se apagaron las luces y Café Tacvba salió al escenario a puro thrash. Arrancaron con No Controles y Rubén Albarrán cantando entre las mesas que desaparecieron del piso de La Trastienda luego de los primeros acordes. Fueron dos horas y media a pura fiesta en un show íntimo en el que repasaron sus mejores temas. Pocas veces tenemos la posibilidad de ver a una de las mejores bandas de rock de Latinoamérica tan cerca, cantando y saltando con cada canción. Los picos como siempre fueron Ingrata, Esa noche y Como te extraño, pero también hubo espacio para climas más tranquilos con canciones como Eres, que de todas formas en vivo suena más potente. El recital terminó como empezó, a puro thrash y con el cantante mostrando una vez más todo su carisma. 
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